Siguiendo con el aprovechamiento de los restos de pan hoy os presento esta salsita blanca que viene muy bien para deshacerte de unos chuscos de pan blanco que tengas por ahí rodando.
La ejecución es muy fácil….se cuece un poco leche –yo usé kéfir- con media cebolla, un poco de laurel, un par de clavos –a mí no me gusta mucho el sabor del clavo y lo cambié por un poco de pimienta. Aunque ésta es la receta tradicional inglesa, se le pueden añadir otro tipo de sabores como nuez moscada –sospecho que sabrá demasiado a croquetas- o darle un toque oriental con cúrcuma, curry o jengibre.
La ejecución es muy fácil….se cuece un poco leche –yo usé kéfir- con media cebolla, un poco de laurel, un par de clavos –a mí no me gusta mucho el sabor del clavo y lo cambié por un poco de pimienta. Aunque ésta es la receta tradicional inglesa, se le pueden añadir otro tipo de sabores como nuez moscada –sospecho que sabrá demasiado a croquetas- o darle un toque oriental con cúrcuma, curry o jengibre.
Una vez que esté hirviendo suave se retira del fuego y se deja reposando, tapada, durante unos quince o veinte minutos para que agarre bien los sabores.
Mientras tanto rallas unos cien grametes de pan y se los añades batiendo a la leche colada –sin las especies que le hayas echado. Con batir el conjunto –si el pan está bien rallado- debería ser suficiente para sacar la mayonesita….yo le dejé parte de la cebolla en la salsa y lo pasé por la minipimer por lo que quedó súper lisa.
La gracia de la salsa es que quede con una textura como de mayonesita clara y con un color blanco inmaculado por lo que hay que tomar precauciones con las especias que se usen y sobre todo con el tiempo que vas a tardar en servirla porque tiende a espesarse mucho….así que si la vais a hacer de un día para otro lo mejor es hacerla con más leche.
La gracia de la salsa es que quede con una textura como de mayonesita clara y con un color blanco inmaculado por lo que hay que tomar precauciones con las especias que se usen y sobre todo con el tiempo que vas a tardar en servirla porque tiende a espesarse mucho….así que si la vais a hacer de un día para otro lo mejor es hacerla con más leche.
Me ha encantao la salsa y el mantel, lo quiero todo! :D
ResponderEliminarel mantel es un paño de cocina de habitat....me parece que te dan tres por diez euro
ResponderEliminarsalsa de pan... sería muy bruto mojar pan? Lo hiciste? yo lo haría.
ResponderEliminarSi, el mantel es bonito bonito.
I les rajoletes de la cuina no te sirven de inspiracion para los cortes del pan?
Un besazo nen!
Estas en plena forma!
Y el vino... que fresquito, en copa, como te cuidas luculillo...aunque no fuera el Oremus ese!
ResponderEliminarsí era pero el seco....éste en concreto http://www.tokajoremus.com/v2/mandolas.asp?idioma=1&seccion=4&subseccion=2
ResponderEliminarchulona mía!!...voy a hacerte emperatriz de Lavapies!!!....
y a alfombrarte con claveles la Gran Vía
ResponderEliminary a bañarte con vinillo de Jerez...
Bon cap de setmana a tots dos!
Esta salsa siempre me ha intrigado (cómo son estos ingleses de raritos, ¿salsa de pan?si es éste el que se moja en aquella!!!)No me imagino el sabor...pero habrá que probar y aprovechar restos.
ResponderEliminarUn saludo.
No tenía idea de esta receta pero me gusta.
ResponderEliminarMe alegra saber que vuelves a estar otra vez por aquí. Te quise leer hace tiempo pero debías andar off.
No olvido lo que te comenté sobre los restos de pan. A ver si esta semana lo subo a mi blog por si no lo tuvieras.
¡¡Un saludito!!