martes, 4 de noviembre de 2008

Etnocentrismo, bimbollos para niños negros y para Obama

Bueno ya todos me conocéis .... soy el perfecto cuentista ..... si por mí fuera me pasaría el día entero contando historias o historietas ... espero que ese alemán que cambia todas las cosas de sitio y te desorienta, llegue lo más tarde posible porque me va a partir por la mitad.

Cuando voy por la calle con alguien no puedo parar de contarle cosas que me pasaron el día que pasé por allí, lo que hacía el día que pasó tal cosa...la historia de la gente que va a ese bar, por qué hay estatuas en el suelo y en las barandillas...no puedo parar...

Hoy estaba todo el día con una cosa que me pasó hace unos años cuando trabajaba en Centroamérica. A alguno de vosotros ya os expliqué que me mandaron una temporada a Panamá -para hacer curros variados, pero fundamentalmente porque era uno de los pocos de la oficina que sabía leer y escribir.

Uf!! me pasaron muchísimas cosas pero una de las más divertidas fue un pequeño accidente que tuve -a unos chavales se les rompió un fleje de acero con el que estaban embalando unas cajas y me hicieron un corte en la cara, nada del otro jueves, no tengo ni cicatriz- me curaron un poco y me marché a un súper a comprarme unas tiritas, las agarré del lineal ,las pagué y cuando las abrí dentro del carro para ponérmelas ¡sorpresa! eran tiritas para negros.

Jamás se me hubiera ocurrido pensar -etnocéntrico que es uno- que eso pudiera existir....al día siguiente en la ofi -90% de negros betuneros- fue la descojonación, pocas veces he visto a tanta gente reírse de mí y tanto. Claro, yo no había visto nunca a un negro con tiritas de blanco puestas, pero ellos tampoco al contrario....después una chica que nos hacía de ayudante -muchas gracias por todo M- me buscó tiritas para blanquito pero vaya, que la coñita duró temporada.

Alguna vez que he contado la anécdota, alguien me explicó que esas tiritas son relativamente recientes -no sé si es verdad porque me parece increíble que nadie hubiera pensado en eso desde hace años- y que quien las patentó se hizo hipermillonario.

Y con esa cuita en la cabeza se me ocurrió que esta semana el juancito se podía ir al cole con un bocata diseñado para que no destaque en la boca de un negrito o al contrario, para que los morenos de su clase se deshueven de él como los compis de su papi lo hicieron hace unos años :))


La química del producto no es sencilla pero merece la pena porque salen buenísimos -ya sabéis que yo casi todo lo copio, en este caso de mi amiga Sandra- esto que veis lleva: 300 gr. de harina de fuerza, una cucharadita de levadura seca, sal, una cucharada de azúcar, una de miel, una de cacao amargo, medio vasito de zumo de mandarina -no tenía naranja-, como 150 cc. de agua y una buena cucharada de mantequilla; a posteriori pensé que quizá hubiera ido mejor cambiar el agua por la leche para que duraran más tiempo tiernos los panecillos.

Pero bueno, si la química es un poco complicada, la ejecución no tiene misterio; se amasa todo junto hasta conseguir una masa tipo brioche pero menos pegajosa que se bolea y se deja reposar tapada un par de horas.

Cuando tiene el doble de volumen, se saca con mucho cuidado y se forman panecillos iguales que se dejan reposar tapados con un trapo limpio, como otra horita. Les hice cortes, porque al no usar leche pensé que se me iban a reventar; visto el final del cuento a lo mejor me los hubiera ahorrado.

Los horneé treinta minutos a 180ºC, pero previamente pintados con clara de huevo y con un espolvoreo de ajonjolí...creo que acerté de lleno en el tiempo y en la temperatura.....

.... y por dentro pues son bollitos oscuritos -todavía no bollicaos, pero todo se andará- muy tiernos, con sabor dulce/salado y con un fondo de naranja y cacao muy english....??

Escribo esto empanado de noticias sobre el comienzo de las elecciones en EEUU. Obama es la nueva moto que nos están vendiendo...creo que me la pela que gane o no aunque lo políticamente correcto entre la progresía que me rodea es decir que el bienestar del mundo va a depender en los próximos años de un tío que de negro no tiene más que el color de mi pan que está hecho con y sabe a ...... harina blanca...... y sólo porque el tío y el pan son negros.... :(

Hay días que leo y oigo cosas que me empujan a ponerme a hacer bimbollos como loco, ja, ja, ja, ja, ja,.......

8 comentarios:

  1. Gracias por la información sobre las harinas. :)) muy buena pinta tienen esos bollitos y el cebiche, bueno, bueno!! Te deseo que disfrutes de tus vacaciones :)

    Un beso

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  2. Preciosos bimbollos los tuyos, le has hecho un regalo estupendo al equipo de Obama, seguro que te roban la idea "bimbollos mulatos". Fuera bromas, me han gustado mucho y los haré

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  3. Me ha encantao lo de las tiritas, es lo que tiene estar viajao, que los mortales ni no planteamos esas tonterías, y a ti te proporcionó una historia muy chula para contar, a pesar de los días de coñita que debiste soportar. Los bimbollos oscurecidos me gustan, y me gusta el corte también, queda mu pofechioná.

    Martola, con los bonys amenazó, pero no sabe ni lo que dice, confundía bonys, bucaneros y tigretones... :D

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  4. cane tía!! cambia el agua por leche que yo creo que van a salir mejor, besotes no has cambiado el servidor todavía, ¿¿no??

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  5. lina y ete queridos!! habéis leido el post en diagonal....dice que todo se andará; en el concepto bollicao entran todas esas guarrerías y además estos son los bocatas de media mañana de mi hijo ¿qué queréis que baje su status gastronómico entre la tribu de su clase con esas guarrerías?

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  6. y sí, sí, joder!! tiritas para negros, a ellos lo que les impresiona es las haya para blancos....

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  7. Pues no, majo, todavía no he tenido tiempo y es que en los últimos meses no vivo, voy como una peonza de aquí para allá. Petonets.

    canela

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